Ha concluido el proceso de elección de los legisladores y ediles nacionales, y está por demás decir que fue un rotundo éxito para el partido oficialista, o partido de gobierno; esto nos mueve a extenderles nuestras más sinceras felicitaciones a los candidatos ganadores por el triunfo obtenido en buena lid, y al pueblo dominicano por su ejemplar muestra de civismo y educación.
Ojalá y cada uno de estos senadores, diputados, síndicos y regidores, puedan entender, y no olviden para que, por qué, y por quienes fueron elegidos; ojalá y no se les ocurra pensar que con esto se les ha entregado el país para dirigirlo a su antojo, ojalá y el nuevo congreso que asumirá el 16 de agosto próximo, sea un congreso aun más eficiente que el actual y que procure fortalecer la institucionalidad del país y por consiguiente la continuidad del estado, desde hoy el pueblo dominicano a comenzado a verter sus esperanzas en un congreso que solo esté comprometido con el bienestar nacional, ojalá y que estos seis años de legislación, no sean una sombra para nuestra frágil democracia; y que con esta gran victoria congresual y municipal, los ministros del gobierno no asuman una actitud avasalladora y arrogante en perjuicio de los ciudadanos y ciudadanas que gozan de pleno derecho constitucional, convirtiendo así en un peligro el poder, casi absoluto, que los votantes le confirieron al PLD; ojalá y todos los funcionarios no olviden, y pongan en práctica aquella frase célebre de campaña electoral de aquel legendario líder cuando decía, con esa gran energía y convicción que siempre le caracterizó: Ganaremos las elecciones, tomaremos el gobierno y gobernaremos para los pobres de este país. (Juan Bosch).
Hasta el próximo comentario.
Obed Pichardo.-
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